Bonita pregunta, ¿no crees?
Me saqué la primera instrucción de 200 horas de Yoga en Namasté Yoga India School, durante el confinamiento, por lo que fue online, no podía irme a la India… Al año me saqué la segunda de 300 horas en la misma escuela otra vez online. Descubrí un mundo que me encanta, estar donde estés y poder ver personas de cualquier parte del mundo. Hablar con ellos, conocerlos, poder corregirnos… Al año siguiente, me especialicé en yoga terapéutico otras 300 horas y adivina… también fue online.
Cuando empecé a dar clases fueron presenciales a toda costa. Poder estar con mi gente, comunicar, corregir las asanas (si hacía falta), la alineación, es algo más cercano, puedes transmitir mucho más. ¡Eso pensaba! Sinceramente, el mundo online hace que puedas llegar a muchas más personas. Así que te pregunto a ti, que prefieres, ¿yoga online o presencial? Mientras te lo piensas te cuento un poco más abajo los pros y contras desde mi punto de vista y experiencia.
Para poder guiarte un poco y para que te hagas una idea de porque planteo esta pregunta, como bien he dicho al principio, me saqué la instrucción en una escuela de la India, quería aprender los orígenes de esta práctica o, mejor dicho, estilo de vida. Quería sacarme la instrucción de forma presencial, pero acabé haciéndolo online, básicamente porque no podíamos viajar. Así que estuve investigando, mirando, buscando escuelas en la india. Minakshi, la directora de la escuela contestó a todas mis preguntas y decidí hacerlo con ella.
Lo mejor de todo, ¡me encantó! Poder sacarme la instrucción «en la India», desde mi casa.
Cuando acabé la instrucción me dije a mi misma, que no me importaba dar clases online. Por un lado, puedes llegar a muchas más personas. Hoy por hoy, tengo yoguis que no viven en Mallorca, que es donde resido, y gracias a internet han podido practicar yoga conmigo. Eso me hizo muy feliz. Poder estar en contacto con aquellas amistades o personas que quieran hacer mis clases estén donde estén (o donde estoy yo), es una grandísima ventaja.
Por otro lado, sin que venga a cuento, me encanta dar clases a aquellas personas que no han practicado nunca yoga. Mi estilo se basa en un yoga para la corrección postural, movilidad de la columna y la musculatura. Quitar el óxido y doblar a esos hierros (este es un nivel menos que el de iniciación, aquellas personas que tienen poca flexibilidad y que no han practicado yoga nunca), es mi motivación.
Con todo lo que te he contado arriba, que crees que es mejor, ¿el yoga online o presencial? Para facilitarte esta elección, o simplemente ayudarte un poquito, te voy a listar las ventajas de ambas prácticas, ¿te parece?
Estas son algunas de las ventajas que tiene poder practicar yoga online. Tanto en directo con tu profe preferid@, como con vídeos grabados que deje en su plataforma preferida, como con profesionales que puedas encontrar en Youtube, como conmigo. Oye, ¿por qué no? Si te interesa, te dejo aquí mi instagram por si te apetece hacer alguna, ¿si? Mándame un mensaje, o comenta alguna publicación, como por ejemplo esta. Estaré encantadísima de poder enseñarte mi estilo.
La mayor ventaja de practicar yoga de manera presencial es, sobre todo, para aquellos que os estéis iniciando en este estilo. Es importante conocer las alineaciones de las asanas para poder sacarle el máximo partido a la práctica.
El yoga te aporta muchos, muchísimos beneficios:
Hoy en día tienes muchísimas opciones para practicar yoga, para mi es una necesidad. Así que espero que te pongas a ello y que pruebes. Eso sí, si no te gusta de buenas a primeras, sigue insistiendo, cambia de estilo, cambia de instructor, sigue eligiendo aquello que te funciona y ¡ya me contarás!
FINANCIADO POR LA UNIÓN EUROPEA CON EL PROGRAMA KIT DIGITAL POR LOS FONDOS NEXT GENERATION (EU) DEL MECANISMO DE RECUPERACIÓN Y RESILENCIA